Hipradermic® reduce los indicadores conductuales del dolor en comparación con la vacunación i.m. con una aguja y representa una alternativa para la mejora del bienestar animal en las granjas porcinas.
Hoy en día, la sociedad exige estrictos estándares de bienestar animal. La vacunación es fundamental para mejorar el estado de salud de las granjas, pero puede ser a la vez un proceso estresante para los animales. Hay distintas estrategias de vacunación que podrían mejorar el bienestar animal.
En este estudio se analizó si el dispositivo intradérmico sin aguja (ID) Hipradermic® mejora el bienestar de los lechones en comparación con la inyección intramuscular con aguja (IM).
Materiales y métodos
Se asignaron aleatoriamente 72 lechones sanos de 4 semanas de edad sin exposición previa al síndrome reproductivo y respiratorio porcino (PRRS) en tres grupos: grupo ID (n = 24, UNISTRAIN® PRRS 0,2 ml/dosis ID), grupo IM (n = 24, UNISTRAIN® PRRS 2 ml/dosis IM) y grupo C (n = 24, grupo control, sin vacunación).
Se realizó una prueba de aversión que consistía en entrenar a todos los lechones para cruzar un circuito de 4 metros (Figura 1) y evaluar el tiempo que tardaban en cruzarlo antes, 10 minutos, 2h, 24h, 48h y 72h después de la vacunación.
Además, se evaluaron las vocalizaciones en el momento de la inyección mediante grabaciones de vídeo y audio, y se realizaron análisis de cortisol en fluidos orales. El análisis estadístico se realizó mediante SAS (valor de p < 0,05).
Figura 1. Lechón cruzando el circuito de 4 metros
Resultados
En el momento de la inyección, el grupo ID tenía menor incidencia de vocalizaciones que el grupo IM (52 % ID frente al 88 % IM, p<0,05) y el número de vocalizaciones agudas (>1000 Hz) también fue menor en el grupo ID que en el grupo IM (0,35 y 1,24 vocalizaciones/animal en los grupos ID e IM respectivamente, p<0,05).
Además, los decibelios (dB) alcanzados por el grupo IM (38 % de lechones vocalizaron a >90 dB) fueron superiores a los del grupo ID (4 % de los animales vocalizaron a >90 dB).
A los 10 minutos de la vacunación, el grupo IM precisó más tiempo para cruzar el circuito en comparación con el grupo ID y el grupo C, y más tiempo del que precisaron antes de la vacunación (Figura 2). No se observaron diferencias significativas con respecto al cortisol salivar.
Figura 2. Tiempo en segundos que tardaron los animales en cruzar el circuito de 4 metros antes de la vacunación, 10 minutos después y 2 horas después de la vacunación.
Hipradermic® reduce los indicadores conductuales del dolor
El aumento de tiempo necesario para cruzar el circuito y la vocalización más elevada (presencia y potencia) muestran que la inyección IM creó más aversión a los lechones que la inyección ID con Hipradermic®.
Estas consecuencias conductuales tuvieron un bajo impacto fisiológico si se tienen en cuenta los resultados de cortisol salivar, algo ya señalado en estudios previos realizados en granjas comerciales1,2.
Se puede concluir que Hipradermic® reduce los indicadores conductuales de dolor en comparación con la vacunación IM con aguja, y representa una alternativa para la mejora del bienestar animal en granjas porcinas.
Bibliografía:
